La infraestructura de recarga de acceso público para el coche eléctrico en España ya alcanza los 37.136 puntos, según los datos proporcionados por la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE) procedentes del conjunto de operadores de recarga.
Con estos datos en la mano, España se posiciona como el sexto país en despliegue de puntos de recarga pública de la Unión Europea. En este sentido, Arturo Pérez de Lucia, director general de la organizacion, ha explicado que "nos situamos en los puestos de cabeza en este tipo de infraestructuras y derribamos el mito de que no tenemos puntos de recarga pública suficientes, algo que acompaña al crecimiento registrado del parque de vehículos eléctricos en el mes de septiembre".
Estos datos se traducen en un crecimiento del 35,4 % respecto al mismo ejercicio del año anterior, teniendo en cuenta que el tercer trimestre de 2024 se han instalado y puesto en marcha 3.031 puntos de recarga de acceso público, con una media de 1.010 equipos al mes, lo que supone el mayor dato interanual de toda la serie histórica.
En el último año se han activado de 9.716 puntos de recarga, y en términos de potencia, el 69 % de los puntos es igual o mayor de 22 kW, mientras que los cargadores de alta potencia (más de 22 kW) ya suponen el 35 % del total.
Con estos datos, España pretende jugar un papel fundamental en la expansión del coche eléctrico en la Unión Europea; sin embargo, según los datos del Observatorio Europeo de Combustibles Alternativos (EAFO), las zonas de carga en España representan apenas el 4,8 % del total de las disponibles en la Unión Europea.
Para enfriar los buenos datos comunicados por AEDIVE, la industria del automóvil calcula que serían necesarios 340.000 puntos en 2030, lo que obliga a multiplicar por 10 los que hay actualmente.
Desde EAFO cifran en 30.385 los puntos de recarga que hay en España, una cifra que prácticamente cuadruplica Francia, con 119.255 y que está muy debajo de la alemana, con 120.625. También Bélgica, con 44.363 y Países Bajos, líder en puntos de recarga en la Unión Europea con 144.453 superan a España.
En este sentido, el Ministerio para la Transición Ecológica, capitaneado por la próxima comisaria de Transición Ecológica, Teresa Ribera, acaba de presentar una actualización del Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC), en el que no hay un cálculo sobre cuántos puntos de recarga serían necesarios para cumplir con los objetivos climáticos, que tendrán que ser impulsados por el auge del coche eléctrico. Sin embargo, entre los objetivos más ambiciosos del PNIEC se encuentra la ampliación del parque de vehículos eléctricos en España, que alcanzará los 5,5 millones de unidades para 2030.
La Comisión Europea pide 3,5 millones de puntos de recarga de aquí a 2030 en el viejo copntinente para apoyar el nivel de electrificación de los vehículos necesario para alcanzar la reducción propuesta del 55 % de las emisiones de CO2 de los turismos. En la actualidad, hay 632.000.
En cambio, las estimaciones de la patronal europea, ACEA, son todavía mayores y calculan que se necesitarían 8,8 puntos en 2030 y 10 millones más en 2035.
En cualquier caso, lo cierto es que los objetivos fijados para 2030 requieren de un empujón si se parte de los datos de 2023.