Iberdrola integrará en su canal de venta de manera directa la adquisición de Certificados de Ahorro Energético (CAE), un sistema de documentos que permite monetizar las inversiones en eficiencia energéticas que realicen las empresas y los particulares.
Bajo este mecanismo, la compañía eléctrica se encuentra a la espera de la publicación en las próximas semanas de una ficha del Ministerio de Transición Ecológica para beneficiarse de los CAE que genere cambiarse de coche, de manera que al adquirir un coche con menos emisiones, el cliente generará un ahorro energético medido en megavatios/hora (MWh).
De esta manera, Iberdrola podrá comprar los recortes energéticos generados por los usuarios que cambien de vehículo, lo cual rebajará el coste de sus adquisiciones, unos descuentos que serán, además, compatibles con otro tipo de ayudas al vehículo eléctrico, como las incluidas en la prórroga del Moves III.
La virtud de los CAE reside en que su desembolso se puede efectuar de manera inmediata, ya sea con un ahorro en el precio de compra u ofreciendo un beneficio en especia, mientras que las subvenciones de Moves III tardan, de media, entre un año y medio y dos años, según denuncian en el sector.
En este sentido, Jon Macazaga, responsable de Iberdrola Smart Services, ha asegurado que este mecanismo permitirá que un sistema de aerotermia, con una inversión inicial de entre 12.000 y 14.000 euros, podrá beneficiarse de una rebaja de entre 1.000 y 2.000 euros. Es decir, de hasta un 14 % en la inversión inicial. Esta misma fórmula se aplicará tanto a clientes como a empresas, pero no solo para aerotermia.
Más de 700 energéticas están obligadas este año a aportar 784 millones de euros al Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE), que equivalen a los 4,3 millones de MWh que Transición Ecológica fijó como meta de ahorro para las electricas, gasistras y petroleras. En este sentido, las firmas pagan este año cada MWh a unos 182 euros, pero el departamento de Teresa Ribera deja un margen del 65 % de los fondos para ser adquiridos a un precio libre, inferior a 182 euros/MWh, en forma de CAE.
Aunque el sistema arrancó en 2023 y se encuentra todavía en fase inicial en España, lleva décadas funcionando en otros países europeos como Francia, desde donde se ha importado el modelo. El crecimiento, por lo tanto, se presenta exponencial, y las estimaciones de la eléctrica indican que en dos años el ahorro energético que deberá ser puesto a disposición del FNEE crecerá en alrededor de 5 millones de MWh, hasta cerca de 9 millones de MWh.
Del mismo modo, la liquidación por parte de las eléctricas a través de los CAE también irá aumentando año tras año, y para 2025, empresas como Iberdrola se podrán abonar a través de los certificados hasta un 80 % de la meta fijada por Transición Ecológica.