El Salón del Automóvil de París le ha servido a Renault para presentar su nuevo 4Ever Trophy, una reinterpretación de su clásico modelo R4, que apuesta por la polivalencia por encima de cualquier otro concepto, lo que le permitirá competir con el Citroën 2CV como uno de los modelos más interesantes para quienes querían un "coche para todo", dentro y fuera del asfalto.

La estrategia de Renault pasa por recuperar los valores de los éxitos del pasado, algo que quedó claro con sus dos últimas presentaciones: el Renault 5 que ha apostado por la deportividad, y este nuevo Renault 4, que tendrá una carrocería SUV de tamaño comedido, por lo que serrá muy aprovechable en ciudad, aunque promete un amplio espacio interior.

Según han reconocido desde la marca, "el Renault 4 eléctrico del mañana pretende ser tan versátil como lo fue, y lo sigue siendo, su antecesor desde 1962". De esta manera, los añadidos sobre la carrocería para transportar, entre otros, una rueda de repuesto, beben de esa idea de que el Renault 4 era mucho más que un coche para moverse sobre el asfalto.

Este nuevo modelo cuenta con una estética tipo buggy, con una carrocería muy ancha, un voladizo de más de 20 centímetros en su paso de rueda, bajos reforzados para proteger la batería de posibles golpes y, además, con pala y placas de extracción de arena incluidas en su portón trasero.

El prototipo también monta un compresor visible para ajustar la presión de los neumáticos y adaptarla al instante a cada terreno, todo un guiño a su pasado competitivo.

Apostar por la nostalgia y aprovechar aquello que puede ser útil en modelos adaptados a los estándares de hoy día es una constante en la compañía francesa, y aunque parece difícil que un nuevo Renault 5 traiga consigo el salvajismo del mítico Copa Turbo, sí que puede aportar ciertas dosis de deportividad al segmento de los eléctricos compactos, algo inexistente a día de hoy.

Así las cosas, estaríamos ante un SUV eléctrico de medidas contenidas pero más ancho y alto, que puede ser especialmente útil para las familias que busquen un coche para moverse por ciudad, aunque sea un modelo que no se espera al menos hasta 2025, año en el que la marca se ha planteado su comercialización.