Los fabricantes de coches eléctricos trabajan en soluciones para que los usuarios no estén limitados a la horade enchufar el vehículo a un punto de recarga fijo, un punto en el que las posibilidades de la carga por inducción tienen mucho que decir. En esta linea acaba de salir al mercado un robot que parece un aspirador Roomba, pero con un objetivo bien distinto: cargar el coche eléctrico de manera autónoma, a través de inducción.
Así las cosas, la empresa francesa EFI Automotive ha desarrollado por encargo de Stellantis, que sigue buscando diversas opciones de carga para sus coches eléctricos, un robot autónomo muy parecido a las ya populares aspiradoras Roomba, que se aproxima de forma autónoma al vehículo y lo recarga por inducción.
Este dispositivo, denominado Ram Charger, está pensado para que los usuarios se olviden de enchufar su coche cuando estén en casa, ya que es capaz de detectar cuando al vehículo le queda poca carga y de desplazarse hacia él para situarse en el punto de transferencia de energía por inducción. Una vez cumplida su función volverá a su puesto para cargarse y estar listo para la próxima conexión.
Sus promotores dicen que este robot consigue una eficiencia del 97 %, superior a la de la mayoría de sistemas de recarga inalámbricos, y que además, consigue velocidades de carga de 7 kW, que es lo mismo que en la mayoría de Wallbox domésticos. También permite opciones como la programación para que funcione a las horas en las que sale más barata la electricidad.
EFI Automotive también ha destacado la posibilidad de alargar la vida útil de las baterías por estos nuevos hábitos en la carga; al tiempo que ha anunciado que ya habría fecha en el horizonte para su producción, pues afirman que podrían tenerlo listo para 2025.