Opel acaba de presentar su nueco Mokka-e, un coche eléctrico con una línea de diseño completamente renovada respecto al modelo de combustión y que se parece más a un Crossover que a un SUV.
Sus características técnicas pasan por ofrecer 322 kilómetros de autonomía con un motor delantero de 136 caballos, y todo ello en una nueva línea de diseño y con un motor Opel Mokka Trasera.
La incorporación de Opel al grupo PSA (Peugeot, Citröen, DS, Opel y Vauxhall) le ha permitido a la marca virar hacia la electrificación usandos la plataforma modular del grupo francés. De esta manera, el Opel Mokka monta un motor de 136 caballos (100 kW) con un par de 260 Nm, las mismas cifras que ofrece el Peugeot e-208.
En el caso de este nuevo modelo, la velocidad punta está limitada a 150 km/h, independientemente de que estemos en el modo Normal, Eco o Sport, una limitación que promete esa autonomía de 322 kilómetros bajo el ciclo WLTP en modo de conducción Normal, pudiendo llegar a algo más en modo Eco.
Cuenta con un sistema de carga rápida con el que podremos pasar de 0 % a 80 % en 30 minutos; y a pesar de ser un SUV/Crossover mide tan solo 4,15 metros, siendo más compacto que el modelo de combustión de la anterior generación.
Con una longitud de 4,15 metros, vendrá equipado con mucha tecnología, entre la que destaca el control de crucero adaptativo para mantener la distancia de seguridad con otros vehículos de forma automática, un freno de emergencia autónomo, una pantalla táctil de 30 pulgadas, una cámara de visión trasera panorámica, aparcamiento automático y compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, entre otros.
Se trata de una gran apuesta de Opel por la electrificación, hasta el punto de que este modelo llega antes que las variantes de combustión, que se esperan para más adelante.