El gigante chino de la automoción del que forma parte MG, SAIC Motor, se ha convertido en el primer fabricante en vender un coche eléctrico con batería en estado sólido. Se trata del IM L6, un vehículo que llegará al mercado con una autonomía de hasta 1.000 kilómetros.

Aunque ya se había anunciado su lanzamiento en el pasado Salón del Automóvil de Ginebra, es ahora cuando se han abierto los pedidos en China para las tres versiones que formarán parte de la gama.

De este trío de opciones, la más interesante,sin duda, es la última, puesto que ofrece una capacidad de 130 kWh, y es la única que utiliza la batería de estado sólido, aunque a la hora de la verdad estamos ante una novedosa batería que combina partes sólidas con partes fluidas.

Entre sus características, destaca el hecho de que tiene una arquitectura eléctrica de 900 voltios, y que es capaz de cargarse en carga rápida a potencias de hasta 400 kW, algo que está muy por encima de los estándares actuales.

Debido a esto último, su velocidad de recarga es considerablemente mayor, hasta el punto de que la marca anticipa que en tan solo 12 minutos se podrá recuperar energía suficiente como para recorrer 400 kilómetros adicionales.

Por si esto fuera poco, homologa un alcance máximo de 1.000 kilómetros, aunque siempre hay que tener en cuenta que el CLTC, el ciclo de homologación chino, es más laxo que el WLTP europeo, por lo que su rango de acción real es sensiblemente inferior.

Por debajo de este modelo "premium", las versiones de acceso emplean baterías convencionales, la primera de 90 kWh de capacidad y la segunda de 100 kWh, anticipando autonomías de entre 700 y 770 kilómetros cada una.

El L6 es una berlina eléctrica que busca competir contra modelos como el Tesla Model S o el Xiaomi SU7, con 4,93 metros de largo y un diseño aerodinámico que incluye formas muy suaves y sin apenas nervios, que incluye paneles de carrocería limpios.

Su interior apuesta por la tecnología punta, con un volante tipo yugo, sin sección superior, que deja hueco a un salpicadero integrado por pantallas de extremo a extremo,que se extienden también a la zona del copiloto, y a las que se suma la situada en la consola central, desde la que se controla el sistema multimedia.

El IM L6 está disponible con sistema de propulsión trasera o de tracción integral; el primero de los cuales ofrece potencias de 293, 337 y 407 CV, mientras que en el segundo son de 787 CV.