El nuevo Citröen C5 X, la berlina insignia de la marca francesa, llega con un diseño a medio camino entre SUV y berlina, en forma de híbrido enchufable fabricado sobre la plataforma EMP2, convirtiéndose en la primera incursión de Citröen en el segmento D de las berlinas electrificadas.
El Citröen C5 X llega con 4,80 metros de largo, 1,86 metros de ancho, y una altura de 1,48, ligeramente más elevada, acercándolo a la experiencia de conducción de los SUV.
Inicialmente se ofrecerá únicamente en versión híbrida enchufable, pero la compañía ya estaría preparando la llegada una versión puramente eléctrica, que estará disponible en varios modelos, partiendo de los 130 CV y alcanzando los 225 CV, con tracción delantera.
La batería eléctrica incorporada en este híbrido promete una autonomía en modo eléctrico de 50 kilómetros, aunque en este modo la velocidad estará limitada a 135 km/h.
En el interior del vehículo se añade una pantalla de 12 pulgadas con resolución HD y un sistema con reconocimiento de voz, actualizable de manera inalámbrica.
El vehículo dispone de cuatro puertos USB-C y cámara de visión exterior con 360º para aparcar, y para complementar la conducción, añade un nivel 2 de conducción semiautónoma, que incluye control de ángulo muerto, velocidad constante y ayudas para mantenerse en el carril 'Highway Driver Assist'.
Citröen ofrecerá en su nueva berlina un maletero con 545 litros de capacidad, ampliables a los 1.640 litros si bajamos los asientos traseros; y para las ruedas optan por unos neumáticos de 720 milímetros de diámetro y llantas de 19 pulgadas.
El nuevo C5 X estará disponible para comprar a partir de octubre y se prevé que los primeros modelos empiecen a rodar por las carreteras europeas entre finales de este año y principios del que viene.