La batería es uno de los componentes básicos del coche eléctrico, siendo una pieza esencial cuya evolución es constante, con el objetivo de lograr una autonomía lo más amplia posible.
En esta linea, un grupo de investigadores alemanes está desarrollando la primera batería del mundo recargable con 1.000 vatios hora por kilogramo, que gracias a sus características, permitiría a un coche eléctrico contar con una autonomía de 1.000 kilómetros con una sola carga.
Esta batería está en este momento en fase de pruebas por parte de la empresa Innolith, especializada en el desarrollo de baterías inorgánicas recargables, y según sus creadores no incluye en su proceso de fabricación materiales “exóticos” y costosos, lo que no le impide contar con una alta densidad, una de las claves de sus extraordinarias características.
Además, se trata de la primera batería de litio no inflamable diseñada para vehículos eléctricos, gracias a que incorpora un electrolito inorgánico que no arde, a diferencia de las convencionales, que si podrían llegar a incendiarse.
Esta batería ofrece una alta densidad en cada celda gracias a la utilización de nuevos materiales y al uso de esto electrolitos inorgánicos, que permiten un ciclo de vida excepcional.
Innolith, que tiene patentes pendientes y mantiene la confidencialidad sobre los compuestos químicos que emplea, previsto mantener el control de todo el suministro de productos químicos que emplea. El objetivo es que esta superbatería esté lista en 3 años.