La Asociación Nacional de Administradores de Fincas (AAFF) ha denunciado el hecho de que el Gobierno esté fomentando el uso y la compra de vehículos eléctricos sin que esto suponga un incremento en el precio de la energía.

La reciente subida del precio de la luz que llegó a alcanzar días atrás máximos históricos, con casi 95 euros por MWh (megavatio hora) sigue provocando quejas; y en este caso, ha sido la Asociación Nacional de Administradores de Fincas (AAFF) quien ha advertido que el actual sistema energético español no está preparado para asumir las pretensiones del Gobierno de fomentar e implantar el uso de vehículos eléctricos sin que esto suponga un incremento en el precio de la energía.

En la actualidad, las ventas de vehículos 100 % eléctricos siguen subiendo y aunque todavía representan el menos del 2 % del total de las matriculaciones en nuestro país, la realidad es que en junio se estableció el mayor número de ventas en lo que va de año, con 2.852 unidades para acumular un total de casi 10.000 unidades, unas ventas impulsadas por el nuevo PLan MOVES III.

En este contexto, esta asociación ha señalado que "el Estado no cuenta con capacidad alguna de control para proteger al consumidor", ya que en circunstancias normales de consumo eléctrico como es el actual, el precio de la energía eléctrica está en máximos históricos. De esta manera, la organización prosigue que "si con el sistema actual el Gobierno no puede garantizar el acceso a la energía a precios razonables, ¿cómo se pueden promover políticas de más consumo eléctrico sin adoptar medidas de protección de suministro y precio al consumidor?".

Los administradores de fincas explican que "entendemos que, si el Gobierno sigue potenciando el consumo eléctrico sin adoptar medidas urgentes de protección de precios, el precio de la energía eléctrica es y será aún más prohibitivo, inviable para una economía doméstica, lo que provoca y provocará aún más pobreza energética y económica a las familias, quedando limitado el acceso a la energía a las clases más pudientes, asfixiando a las clases sociales más desfavorecidas de nuestro país".

Así las cosas, la organización ha planteado que si el Estado no tiene capacidad para garantizar el acceso a la energía a precios razonables, no debería promover políticas de más consumo eléctrico hasta que pueda garantizar que todos los consumidores accedan a electricidad a precios asequibles. "Todos somos conscientes de que hay que luchar contra la emisión de gases y la contaminación con políticas que protejan nuestro medio ambiente, así como de las posibilidades que tiene nuestro país para la producción de energías limpias y renovables, pero en estos momentos España no está preparada para aumentar drásticamente el consumo de energía eléctrica sin que esto suponga un encarecimiento en el precio para la población", ha concluido.