Mucho se ha hablado de la opción de que Ford continue con la saga del icónico Fiesta, pero transformado en un modelo 100 % eléctric; pero ahora Martin Sanders, director general de la marca para Europa, ha afirmado que la compañía “no lo descarta”, situándolo en el marco de un compromiso de colaboración de la firma norteamericana con Volkswagen para la fabricación de varios modelos.

De esta manera, ya parece asegurado que Ford lanzará en breve un todocamino de tamaño compacto llamado Explorer, basado en la plataforma del grupo alemán. Sin embargo, la tendencia de búsqueda del comprador europeo de un coche eléctrico pero de pequeño tamaño y precio asequible, ha dado alas ahora a la posible resurreción del mítico Fiesta.

Se trata de una tendecnia que está obligando a todos los fabricantes a recuperar un segmento que pretendieron soslayar en los inicios del coche a baterías: el de los urbanos pequeños y asequibles.

Aunque los coches más grandes cuentan con más espacio para poder ubicar baterías mayores que ofrecan mayores autonomía, el enfoque de tamaño reducido ya genera expectativas, y cuando Volkswagen presentó hace escasas fechassu modelo ID2all, un urbano eléctrico que podría vender por debajo de los 25.000 euros, despertó la vieja idea de que el Fiesta tuviera continuación utlizando la misma plataforma MEB Entry de Volkswagen.

Esta apuesta permitiría a ambas marcas obtener mejores economías de escala en el producto, aunque ambas marcas son coscientes de que los precios actuales de las baterías, harán que el precio del coche completo anunciado sea difícil de manrtener.

El último Fiesta salió hace tan sólo unos días de la planta alemana de Colonia, ya que las normas de emisiones obligaron a Ford, como a tantas otras marcas, a abandonar el segmento de coches pequeños y con márgenes reducidos, a riesgo de perder dinero.

Por contra, el eléctrico de plataforma compartida, aunque sería caro de producir por el coste de los materiales y de la producción de la batería, resultaría más económico desde la perspectiva de un menor número de trabajadores empleados para su ensamblaje.

La preguntra "del millón" ahora es si podría recalar un renacido Fiesta 100 % eléctrico en Almussafes, lo que parece ser que no, a juzgar por las explicaciones de la marca, debido a que la plataforma de Ford con la que parece que trabajará la planta levantina será una específica para vehículos grandes; aunque lo ciertoes que Ford no ha clarificado qué coches se fabricarán en la Comunidad Valenciana.