Ampere, la división de vehículos eléctricos de Renault, ha comenzado a dar sus primeros pasos, con el objetivo de liderar la transición hacia el vehículo eléctrico del grupo automovilístico francés, y que espera fabricar 400.000 vehículos al año, que podrían llegar a 620.000 en 2028.
Así las cosas, esta nueva compañía, presidida por Luca De Meo y fundada el pasado 1 de noviembre, se ha convertido en un ente independiente especializado en la producción de modelos eléctricos y software, contando con más de 11.000 empleados, el 35 % de los cuales son ingenieros, que seguirán de cerca los trabajos en las plantas de ElectriCity (Douai y Maubeuge), Ruitz y Cléon.
Ampere contará con una capacidad de producción de 400.000 vehículos al año, que podrían llegar a 620.000 en 2028, y cuenta con un ambicioso plan para conquistar el mercado, con el que pretende "democratizar los vehículos eléctricos en Europa", logrando la paridad de precios entre los modelos de combustión interna y eléctricos antes que sus competidores en los segmentos B y C.
Según la compañía, estas dos categorías representarán el 75 % del mercado de coches eléctricos en 2030, y por este motivo ya cuentan con dos plataformas disponibles: la plataforma AmpR Small para el segmento B y la AmpR Medium, para el segmento C. Con todo, esta transición será progresiva, ya que antes de lanzar estas plataformas, Ampere pretende reducir costes.
Más concretamente, de aquí a 2028 la compañía pretende reducir un 40 % los gastos variables entre la primera y segunda generación de vehículos eléctricos del segmento C, a través de unas líneas de actuación muy concretas.
De esta manera, Ampere ya ha logrado parcialmente este objetivo con el Scénic E-Tech, cuyo coste total de mantenimiento, según los cálculos de la compañía, es igual al de los vehículos híbridos; con lo que podríamos decir que, en general, Ampere espera alcanzar esa igualdad de precios a partir de 2028, con la segunda generación de vehículos eléctricos de la compañía.
Al mismo tiempo, la gama se ampliará gradualmente, con el Renault 5 (2024) y el Renault 4 (2025), al que se sumará el esperado Legend, un modelo del segmento A que se presentará en el Capital Markets Day de Ampere, y que será una especie de nuevo Twingo, convirtiéndose en el vehículo urbano de Renault, con un consumo estimado de 10 kWh cada 100km, una reducción del 75 % de las emisiones de CO₂ respecto a la media de los vehículos de combustión europeos vendidos en 2023 durante su ciclo de vida y un menor consumo de materias primas gracias a sus dimensiones compactas.
La gama se ampliará aún más con la incorporación de dos vehículos de segunda generación, hasta un total de siete modelos de aquí a 2031.
Con un objetivo de ventas de alrededor de 300.000 unidades en 2025, Ampere espera vender alrededor de 1 millón de unidades en 2031, alcanzando así una cuota de mercado de aproximadamente el 10 %.
Además, Ampere también ha sido concebida para ser una plataforma tecnológica, productiva y comercial al servicio de marcas distintas de Renault, gracias a la flexibilidad de las líneas de producción, la modularidad de ambas plataformas y la competitividad en términos de costes; y de hecho, producirá al menos dos modelos para Alpine, el próximo Micra para Nissan y otro modelo para Mitsubishi, al tiempo que apoyará el viaje hacia la electrificación de Dacia y ofrecerá soluciones de software para todo el Grupo Renault.