Las células fotovoltaicas son capaces de añadir kilómetros adicionales a los coches eléctricos gracias a la luz del sol y poco a poco van siendo más accesibles y eficientes.
Para aprovechar esta realidad, la compañía OPES Solutions y el Fraunhofer Center For Silicon Photovoltaics CSP han desarrollado una nueva placa fotovoltaica flexible diseñada específicamente para el uso en los coches eléctricos, y aseguran que es capaz de proporcionar hasta 50 kms. más de autonomía.
Estos paneles solares denominados SolFlex son unas células solares cristalinas que alcanzan, según las pruebas realizadas por los fabricantes, alrededor de un 30 % más de potencia por metro cuadrado que los módulos actuales y una eficiencia de más del 22 %.
Cuentan con unos diodos de derivación integrados y tecnología de media celda que podrían garantizar un rendimiento óptimo incluso cuando el cielo está nublado y hay poca luz solar. Además, su flexibilidad alcanza hasta los 15 grados, por lo que hace que sea aplicable a prácticamente cualquier superficie de cualquier vehículo, ya sea un coche, una furgoneta o incluso trenes y camiones.
En su versión básica, esta célula mide un 1 metro cuadrado, pero puede ampliarse hasta 3,6 metros cuadrados, ofreciendo una potencia de 170 W que puede incrementarse hasta los 600 W. Por otra parte, la anchura de estas placas es de 2,9 mm sin la cinta adhesiva.
Los módulos SolFlex son resistentes a las vibraciones, están diseñados para altas cargas de calor unilateral y tienen una superficie resistente a los arañazos.
Cada vez son más los vehículos que montan en sus techos pequeños paneles solares que permiten aportar un extra de energía o de autonomía, desde las caravanas y furgonetas camperizadas hasta vehículos que prometen funcionar algunos kilómetros más gracias a la luz del sol. Para ganar eficiencia, los fabricantes buscando crear un sistema lo suficientemente ligero y eficiente para que sea efectiva, y Opes Solution, parece haberlo logrado.