Uno de los principales impedimentos para la adopción del coche eléctrico de forma masiva es su alto coste, bastante superior al de los modelos de combustión. Para solventar esta situación, existe la posibilidad de transformarlos en eléctricos, pero es algo que es todavía complejo y requiere demasiado tiempo y dinero. Pero esto podría cambiar...

Este cambio podría llegar de la mano de la startup alemana e-Revolt, que propone un sistema de conversión mucho más rápido y económico. La idea, similar a la de los kits de conversión de bicicletas en eléctricas, pasa por industrializar y escalar a nivel industrial un proceso que permitiría dar una segunda vida a miles de vehículos, y cumplir de este modo con las cada vez más restrictivas normas de circulación, sobre todo para acceder al centro de las ciudades.

Según ha afirmado Stefan Sellschopp, director general de e-Revolt, "nuestra tecnología te permite convertir tu coche actual en el coche eléctrico de tus sueños. Tu vehículo actualizado será eléctrico, estará totalmente conectado y equipado con interfaces digitales de última generación".

Esta tecnología, que ya está patentada, está dando los primeros pasos en Alemania en colaboración con decenas de talleres mecánicos, y permite convertir en eléctricos hasta 42 modelos diferentes de distintos fabricantes, siendo su versatilidad el principal punto a favor de esta solución, ya que sólo se tardan 8 horas en tener el coche listo para su uso, eso si, con un coste final todavía demasiado alto, y que oscilará entre los 12.000 y los 15.000 euros.

Para iniciar el proceso de conversión, los técnicos de e-Revolt primero tienen que evaluar el estado del vehículo para comprobar si la actualización es viable. Primero se verifica on-line el modelo de coche, pero también es necesaria una inspección física en alguno de los talleres asociados a la red de la empresa.

Una vez comprobada su compatibilidad, se procede a retirar el motor de combustión, además de otros elementos que ya no son necesarios, para pasar a abordar el siguiente paso que consiste en la instalación del bastidor plug and playexclusivo de e-Revolt, que permite instalar rápidamente todos los componentes eléctricos y, además, posibilita futuras actualizaciones.

La prioridad de la empresa es la seguridad y fiabilidad de todos los materiales, por lo que han sido diseñados "específicamente para mantener la resistencia al impacto y proteger tanto a los pasajeros como a los peatones".

La mayor novedad que representa el sistema de la compañía alemana frente a otras alternativas de conversión hya existentes, tiene que ver con que el método está completamente estandarizado, sea cual el modelo de coche y el taller que lo lleve a cabo, de modo que cada manguera y tornillo necesarios son suministrados por e-Revolt, lo que permite una mayor precisión y rapidez a la hora de realizar la transformación.

Este cuidado por el detalle también es imprescindible para que el vehículo resultante cumpla con todas las normativas legales y pueda circular sin problema tanto en carretera como en ciudad.

El proceso incluye un control de calidad final realizado por una agencia independiente, que supervisa que todos los cambios realizados garanticen un alto estándar de seguridad.

Además del bastidor, el otro elemento fundamental de este kit de conversión es el módulo e-CAN, una pieza diseñada y fabricada por la compañía que permite la completa digitalización del sistema del vehículo y su conexión con "nuevos componentes eléctricos sin restringir ninguna de sus funcionalidades", lo que incluye la instalación de un nuevo sistema de infoentretenimiento, con una gran pantalla táctil, con acceso a la autonomía restante o el control de carga del coche.

De esta manera, los vehículos convertidos pueden acceder a los servicios conectados y a los sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS), como el frenado autónomo de emergencia, el asistente de mantenimiento de carril o los sensores de aparcamiento. Además, podrán acceder a las "actualizaciones de software y hardware que permiten prolongar la vida útil del vehículo de forma sostenible y rentable".

La compañía alemana no ha especificado de momento otros componentes del kit, como el motor, pero sí la autonomía que alcanzarán los coches, estimada en 250 o 300 km, dependiendo del modelo concreto de automóvil.

Los responsables de este desarrollo aseguran que pueden llevar a cabo todas las tareas de conversión en un solo día, frente a los meses que afrontan quienes recurren a otros sistemas de conversión.

En la compañía han insistido en la modularidad y la capacidad de adaptación de los vehículos a las necesidades del conductor, incluidas mejoras en autonomía, de forma que "cada componente puede cambiarse por otro", lo que favorece una personalización a medida.