Diseñadores e investigadores de Ford trabajan en el desarrollo de un cable que reduce el tiempo de recarga de los coches eléctricos, para lo que han buscado la colaboración de un equipo de investigadores de la Universidad americana de Purdue.
La novedad de este proyecto se basa en que no sitúa la responsabilidad de los tiempos de carga en el vehículo o el cargador, sino en el cable que conecta ambos elementos.
En este sentido, según ha comentado Michael Degner, responsable técnico de Investigación e Ingeniería Avanzada de Ford “hoy en día, los cargadores tienen limitaciones en cuanto a la rapidez con la que pueden cargar la batería de un vehículo eléctrico debido al peligro de sobrecalentamiento”, a lo que ha añadido que “la carga más rápida requiere más corriente para viajar a través del cable de carga; cuanto mayor sea la corriente, mayor será la cantidad de calor que se debe eliminar para mantener el cable en funcionamiento”.
Para evitar el exceso de calor, el cable de carga desarrollado por Ford utiliza un líquido como agente refrigerante activo, que puede ayudar a extraer más calor del cable cambiando de fase de líquido a vapor; algo que no permite la tecnología de refrigeración líquida actual.
Segñun a apuntado Issam Mudawar, profesor de ingeniería mecánica en la Universidad de Purdue, “el tiempo de carga de un vehículo eléctrico puede variar ampliamente, desde 20 minutos en una estación hasta horas en una estación de carga en el hogar, y eso puede ser una fuente de ansiedad para las personas que están considerando comprar un vehículo eléctrico”, tras lo que ha matizado que “mi laboratorio ha ideado una solución para situaciones en las que las cantidades de calor que se producen están más allá de las capacidades de las tecnologías actuales”.
Con esta nueva tecnología de enfriamiento, los ingenieros de Ford y de la Universidad de Purdue aseguran que el tiempo de recargar de un vehículo eléctrico se reduce hasta quedar cerca del llenado de un depósito de diésel o gasolina.
El equipo encargado del desarrollo de la idea espera comenzar a probar un prototipo de cable de carga en los próximos dos años para determinar velocidades de carga más específicas.