La Unión Europea (UE) y Estados Unidos han creado un grupo de trabajo específico para abordar la Ley de Reducción de la Inflación estadounidense, una normativa que preocupa a los europeos por considerar que podría discriminar su producción de vehículos eléctricos.
La Comisión Europea ha explicado que el grupo se impulsó durante una reunión en Berlín entre Bjoern Seibert, jefe de Gabinete de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el viceconsejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Mike Pyle, con el objetivo de tratar una serie de cuestiones prioritarias, entre ellas la reconstrucción de Ucrania.
Desde la Comisión has explicado que “el grupo de trabajo abordará las preocupaciones específicas planteadas por la UE en relación con la Ley de Reducción de la Inflación”, para agregar que ambas partes “coincidieron en la importancia de una estrecha coordinación para apoyar las cadenas de suministro sostenibles y resistentes a través del Atlántico, incluyendo para construir la economía de la energía limpia”.
La Ley de Reducción de la Inflación, aprobada por el Congreso estadounidense, pretende entre otros objetivos bajar el precio de la energía en los próximos meses, siendo uno de los proyectos estrella del Gobierno de Joe Biden, y contempla más de 400.000 millones de dólares en nuevas inversiones, casi todas centradas en dar un impulso a la industria de la energía verde en el país y reducir las emisiones de gases contaminantes.
En cambio, la Comisión Europea ya advirtió en agosto de que los planes estadounidenses para impulsar el vehículo eléctrico, con créditos de impuestos a los compradores de ese tipo de automóviles, discriminan a los productores extranjeros.
Bruselas ha indicado que la primera reunión del grupo de trabajo, que está “basado en un compromiso de alto nivel entre la Comisión Europea y el Gobierno de los Estados Unidos”, se celebrará la próxima semana, y ha apuntado que Seibert participará en esos trabajos, en los que se implicarán también el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan; el director del Consejo Económico Nacional, Brian Deese, y el asesor principal para la Innovación y la Implementación de la Energía Limpia, John Podesta.
El vicepresidente ejecutivo de la Comisión y responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis, celebró a través de su perfil en Twitter el establecimiento de este grupo de trabajo y consideró que “ayudará a llevar adelante nuestra cooperación, abordando serias preocupaciones de la UE con vistas a encontrar soluciones conjuntas”.
En una llamada con los secretarios de Estado de EE. UU., Antony Blinken, y de Comercio, Gina Raimondo, así como la representante de Comercio estadounidense, Katherine Tai, y la vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea y responsable de Competencia, Margrethe Vestager, Dombrovskis ya trató la cuestión del coche eléctrico y la Ley de Reducción de la Inflación.
Entonces, acordaron también celebrar el 5 de diciembre en Washington la próxima reunión del Consejo de Comercio y Tecnología, un foro puesto en marcha por la UE y EEUU para coordinar sus enfoques sobre cuestiones comerciales, económicas y tecnológicas clave a nivel mundial, y para profundizar en las relaciones comerciales y económicas transatlánticas basadas en valores democráticos compartidos.
