El Consejo de Ministros en funciones ha aprobado, en tiempo de descuento electoral, una desgravación en el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del 15 % para la compra de vehículos eléctricos o la instalación de puntos de recarga para incentivar la transición verde, que ha justificado "ante la lentitud de algunas comunidades autónomas en la aplicación del programa de ayudas Moves III".

Esta medida, que se aplicará con un máximo de 20.000 euros y estará en vigor hasta el 31 de diciembre de 2024, con la posibilidad de ampliarlo un año más, está incluida en el Real Decreto-ley para prorrogar algunas de las medidas aprobadas para hacer frente a las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania y la subida de precios que caducan el próximo 30 de junio.

Según ha explicado la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, "se trata de consolidar las inversiones en marcha en nuestro país para la modernización de la industria automovilística dentro del conocido como Perte VEC para que España se sitúe a la vanguardia del despliegue en Europa del vehículo eléctrico y conectado". 

La medida la había avanzado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una entrevista en Cadena Ser, donde explicó que se trata de una deducción, una desgravación en IRPF del 15 % "para la compra de vehículos eléctricos que incentiven esta transición para hacer frente a la emergencia climática y hacer posible la movilidad sostenible en nuestro país". Pese a la novedad del anuncio, Sánchez indicó que "es algo que ya teníamos elaborado en la adenda que se ha presentado a la Comisión Europea". 

Pese a que la medida supone una buena noticia para el sector, en función del nivel de renta del beneficiario, ya que Hacienda nos restará entre el 19 % y el 47 % de la ayuda asignada; esta desgravación del 15 % ahora aprobada, no atajará el desincentivo que supone tardar tanto tiempo en recibir el dinero, ya que sólo se hará efectiva en la declaración del ejercicio posterior a la compra del vehículo, lo que supone que, en un caso extremo, eso supondría esperar casi dos años si el coche se adquiere en enero de 2024, por ejemplo, y la declaración no se liquida hasta finales del año siguiente

El presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), Wayne Griffiths, y el presidente de la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto), Francisco Riberas, han celebrado la medida, que consideran un "paso en muy buena dirección" ante las escasas compras de vehículos eléctricos por parte de los ciudadanos.

En este sentido, Griffiths ha considerado que hay que "pasar al ataque" y "salir a ganar", atrayendo nuevos proyectos a España y conseguir coches eléctricos a precios accesibles.

Esta medida llega apenas a un mes de que se celebren nuevas elecciones, y se produce a pesar de que hasta ahora, el Plan Moves III no ha dado el resultado esperado. Dotado con hasta 1.200 millones de euros, las ayudas son realmente gestionadas y concedidas por las distintas Comunidades Autónomas, lo que conlleva que se tarden varios meses, que puef¡den llegar hasta año y medio, en cobrarlas.