El Plan Moves Flotas, que estará en vigor hasta finales de marzo, se creó para impulsar la electrificación de las flotas de empresas, pero incomprensiblemente, impone como requisito la adquisición de al menos 25 vehículos, algo que, según las asociaciones profesionales del sector, deja fuera de las ayudas al 99 % de los transportistas

El Programa de ayudas a proyectos de electrificación de flotas de vehículos ligeros (Plan Moves Flotas) se activó hace algunas semanas como complemento al programa de ayudas a la adquisición de vehículos eficientes (Moves III) y la Plan Moves Singulares II, con la particularidad de que está dirigido a empresas, y no a particulares.

Gestionado por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE), este programa tiene un presupuesto de 50 millones en su primera convocatoria, una cantidad con la que se subvencionarán “proyectos que promuevan la electrificación de flotas en el territorio nacional”, y que contempla incentivos para tres actuaciones esenciales que tendrá que afrontar cualquier empresa.

La primera es la referente a la compra, con subvenciones que rebajan la adquisición de vehículos siempre que sean eléctricos (eléctricos puros o híbridos enchufables) y/o de hidrógeno (pila de combustible); la segunda es un apoyo al plan del Gobierno que pretende acabar 2023 con 100.000 puntos de recarga subvencionando parte de la instalación de cargadores en los lugares de trabajo; mientras que la tercera cubre parte de la adquisición o adaptación de sistemas de gestión de flotas, para, entre otros, digitalizar el control de rutas o mejorar la formación de personal de la empresa.

Mientras la primera línea de ayudas es de obligado cumplimiento; las otras dos son opcionales, de modo que solo podrán optar a las ayudas a la instalación de cargadores o la adquisición de sistemas de gestión aquellas empresas que previamente hayan solicitado ayuda a la compra de vehículos eficientes, aunque no es este el requisito que ha provocado las quejas de las asociaciones de transportistas, sino el que impone que para optar a las ayudas del Plan Moves Flotas habrá que hacerlo con la compra de un mínimo de 25 vehículos.

Así las cosas, desde la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer), han señalado que “pese a que las bases de la convocatoria señala que las ayudas van dirigidas también a microempresas, en la práctica sólo podrán acogerse unas pocas grandes empresas ya que más del 99% de los actuales transportistas de vehículos ligeros en España tienen una flota muy inferior”, para añadir que “los requisitos exigidos hacen que en la práctica sólo grandes empresas y multinacionales podrán acogerse a las ayudas”.

Según esta asociación “denotan un desconocimiento absoluto de la realidad del sector del transporte ligero en España, conformado mayoritariamente por autónomos y microempresas”, lo que han justificado aportando los datos de que más del 73 % de las 34.000 empresas que operan en España en el segmento del transporte está conformado por transportistas autónomos, y casi el 90 % de ellos son titulares de un máximo de 5 vehículos de transporte. “En la práctica sólo un 0´5 % de las empresas de transporte podrán ser beneficiarias de dichas ayudas”, han enfatizado.