La compañía china Kandi Technologies Group pretende conventirse en el adalid de los coches eléctricos de bajo precio en EEUU a partir de su nuevo modelo: el Kandi K27, que saldrá a la venta en aquel país a partir de 12.499 dólares, después de reducir los 7.500 dólares de los descuentos federales.

Kandi consiguió hace un año permiso de las autoridades estadounidenses para comercializar coches en suelo norteamericano, y ahora está dispuesto a hacerse con una cuota de mercado importante con el precio como gran atractivo.

Se trata de un utilitario que mide 3,5 metros de longitud, 1,44 metros de ancho y 1,61 m de alto con capacidad para cuatro pasajeros, convirtiéndose así en un coche de dimensiones similares a las de un smart forfour.

Su diseño parece una mezcla entre el Mini Electric y el mencionado smart, aunque con una silueta más elevada y una carrocería más musculada.

Monta un motor eléctrico de pequeñas dimensiones que desarrolla 20 kW de potencia (27 CV) y la envía a las ruedas delanteras, pudiendo alcanzar una velocidad máxima de unos 100 km/h, unas prestaciones que sugieren el enfoque urbano de este modelo.

El motor está alimentado por una batería de iones de litio de 17,7 kWh de capacidad que le concede en torno a 160 km de autonomía, y el tiempo de recarga de la batería es de siete horas conectado a una toma de corriente doméstica.

El equipamiento de este modelo es un poco exiguo, y la compañía destaca la cámara trasera o el dispositivo de aviso de exceso de velocidad entre sus sistemas de ayudas a la conducción.

De la comercialización y distribución se encargará Kandi America, la filial de la compañía china para el mercado estadounidense, que prevé que las primeras entregas se materialicen en el cuarto trimestre de 2020.