El Mini EV, que destaca por ser el coche eléctrico más barato del mundo, podría ver bajar su precio todavía más al permitir a sus compradores prescindir de comprar la batería a cambio alquilarla con un sistema similar al que está utilizando la compañía española Silence en sus scooters eléctricos y en su nuevo cuadriciclo Silence 04.

Así las cosas, el modelo Mini EV fabricado y comercializado en China por la alianza de las empresas SAIC, General Motors y Wuling ha anunciado la posible reducción de su ya exiguo precio, a través de una nueva campaña con la que espera impulsar todavía más sus ventas.

De esta manera, el precio del Wuling Mini EV en su versión básica ha bajado de los 32.800 yuanes (4.315 euros) que anuncia la tarifa de su catálogo en los concesionarios a solo 19.800 yuanes (2.604 euros), con un pago final de 1.980 yuanes (260 euros).

A cambio de esa rebaja, los usuarios tendrán que aceptar un pago mensual por la suscripción o alquiler de la batería de 198 yuanes (26 euros) para unas versiones con una autonomía limitada a un máximo de 120 kilómetros.

De esta forma, la versión Fashion Model Macaron, que es la que cuenta con mejores acabados y una gama de colores más amplia, ha pasado de 43.800 yuanes a 29.800 con la misma cuantía mensual de alquiler de la batería.

Con este sistema de suscripción que sustituye a la compra de la batería, la versión más equipada de este minicoche eléctrico cuesta 33.800 yuanes con un alquiler de 558 de una batería de más capaciad que permite una autonomía de hasta 300 kilómetros.

El Mini EV se ha convertido en un fenómeno de masas en China, y especialmente entre los más jóvenes, con unas medidas de apensa  2,917 metros de largo, 1,493 metros de ancho y 1,621 metros de alto, y una distancia entre ejes de 1,940 metros.

Además, el modelo ha sido sometido a rigurosas pruebas de seguridad, y cuenta con más del 57 % de la carrocería elaborada en acero de alta resistencia; y va equipado con ABS, y sensores de presión de neumáticos y de marcha atrás.