Tener un garaje y la posibilidad de instalar en él un punto de carga particular es necesario para quienes utilizan a diario el coche eléctrico; sin embargo, esta situación no está al alcance de cualquiera en España, y los que no tiene garaje normalmente renuncian a uno de esto vehículos. Una nueva farola, podría camiarlo todo...
La idea de tener que buscarse la vida para aparcar un coche eléctrico en la calle y recargarlo, para muchos todavía no es viable, y la única solución pasa por aumentar el número de cargadores disponibles en ciudad pero.
Ahora, la compañía Voltpost acaba de anuciar el desarrollo de una posible solución para este problema: que cada farola de la calle cuente con un enchufe para recargar vehículos.
La idea de Voltpost es una farola cuya base alberga un cargador para vehículos eléctricos, y que puede instalarse en una hora de forma económica y sin obras complejas ni ruidosas.
Se trataría de un punto de carga inteligente que, además de proporcionar luz al barrio, permitiría recargar un vehículo eléctrico a una velocidad relativamente rápida.
Aunque Voltpost no aporta datos concretos, sí describe su cargador como Nivel 2, lo que bajo los estándares de Estados Unidos significa una potencia de carga máxima de 19,2 kW, con la que sería posible recargar un vehículo común en poco más de dos horas.
Mediante la app propia de Voltpost, el usuario podría conocer a través de su smartphone el estado y la disponibilidad de los cargadores cercanos a su posición.
El cuerpo de la farola de Voltpost puede incorporar hasta cuatro tomas de carga, todas ellas con un cable integrado que permanece replegado cuando no se usa, y que posee una angulación de 90 grados en el extremo que se conecta al coche. Con ello, se elimina por completo la posibilidad de que los peatones tropiecen con el cable al pasar por las cercanías.
Por el momento, Voltpost es una idea originaria de EE UU, y la compañía ha instalado ya algunos de estos cargadores a modo de prueba en Nueva York, y próximamente lo harán en otras ciudades del país.