La Generalidad de Cataluña ha aprobado un Real Decreto que regula el servicio de Vehículos de Alquiler con Conductor (VTC), una nueva normativa que impone una serie de requisitos para los vehículos que presten este servicio, que tendrán que estar catalogados como ECO o Cero Emisiones.

Cuando entre en vigor la nueva normativa que regula el funcionamiento de los Vehículos de Alquiler con Conductor (VTC) en Cataluña, solo podrán prestar servicio aquellos con un longitud superior a 4,90 metros, un requisito que dejará inoperativa a buena parte de la flota de vehículos de empresas como Uber y Cabify, que han denunicado que la medida va en contra de lo establecido por la Comisión Europea (CE) que defiende el uso de vehículos “pequeños, sostenibles y ecológicos” y que, de esta forma, “redunden en una mejor calidad del aire”.

Desde Cabify argumentan que “se trata de un requisito oxímoron, ya que los vehículos menos contaminantes (ECO o Cero) suelen contar con un tamaño menor, precisamente para ser más eficientes debido a un menor peso y tener un menor consumo”.

Así las cosas, entre los nuevos requisitos para operar como VTC en el Área Metropolotina de Barcelona habrá que ser titular de una autorización de VTC domiciliada en Cataluña y con un vehículo que haya sido adscrito para uso en VTC al menos el último año.

El texto recoge la necesidad de disponer de un seguro de responsabilidad civil que cubra hasta la cuantía de 50 millones de euros; similar al que tienen que tener los taxistas.

Una vez entre en vigor, el Real Decreto de las VTC en Cataluña obligará a que todos los vehículos nuevos que se destinen a este servicio tengan etiqueta ECO o Cero Emisiones.

Para los responsables de Cabify esto es una incoherencia ya que, a día de hoy, los segmentos ECO y Cero Emisiones suelen ser vehículos de tamaño inferior a los 4,90 metros de longitud que se establece como requisito imprescindible. “Como muestra de la dificultad para adaptar la operativa a la regulación, actualmente, más del 70% de los coches conectados a Cabify en Barcelona son ECO o Cero; sin embargo, menos del 1% de estos vehículos mide más de 4,90 metros”, aseguran los responsables de la plataforma.

“Las tendencias de mercado apuestan por la eficiencia energética de los nuevos modelos y, como consecuencia, la escasez de coches que cumplan los requisitos impuestos por la Generalitat supone una barrera que imposibilita una transición ordenada”, añaden.

A día de hoy, es habitual el uso de Tesla Model 3, Hyundai Ioniq o Toyota Prius, que quedan fuera del corte. A partir de ahora, empresas como Uber o Cabify tendrán que subir el escalafón y buscar modelos de alta gama si quieren seguir prestando servicio en la ciudad condal.