El Plan de Apoyo a la Movilidad Alternativa elaborado por el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital y que premia la adquisición de vehículos de energías alternativas, ha decidido dejar fuera a la bicicleta eléctrica en su edición de 2018, un medio de transporte que cada vez es más popular entre la población.

Desde el pasado 2013, el ejecutivo ha promovido el uso de la bicicleta eléctrica mediante el Plan Movea, con ayudas de 200 euros para la compra de estos vehículos, pero en este nuevo plan solo se podrán acoger motos, cuadriciclos, turismos, furgonetas y camiones, siempre y cuando estén propulsados por autogas, gas natural, bifuel gasolina-gas así como aquellos que sean eléctricos. Estos podrán aspirar a unas ayudas que van de los 500 hasta los 18.000 euros, en función de la categoría del vehículo.

En total, este nuevo Plan Movalt Vehículos, subvencionará la compra de alrededor de 5.600 vehículos y evitará la emisión de unas 9.500 toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.

La noticia ha impulsado las quejas de las organizaciones de Red de Ciudades por la Bicicleta, que mediante un comunicado, ha esgrimido su malestar por la decisión tomada por el ejecutivo, que ha optado por dejar fuera a unos vehículos por los que lleva apostando desde hace varios años.

Esta asociación ha explicado que "desde la Red de Ciudades por la Bicicleta mostramos nuestro total desacuerdo con la exclusión de la bicicleta eléctrica en el Plan de Apoyo a la Movilidad Alternativa (MOVALT) del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital. Un plan cuyo objetivo es incentivar la compra de vehículos de energías alternativas y la instalación de puntos de recarga eléctrica no puede obviar la cada vez mayor presencia de este tipo de vehículos en nuestras calles".

Del mismo modo,la organización ha recordado que hace unos años si se pudieron acoger a ciertas ayudas y que han pedido al Ministerio que reconsidere su postura: "muchos de nuestros asociados han apostado de una manera directa, poniendo en marcha políticas de promoción de la bicicleta eléctrica de manera local, fomentando de este modo un transporte más sostenible. De igual modo, desde el año 2013 el Gobierno estatal ha promovido el uso de la bicicleta eléctrica mediante el anteriormente mencionado Plan Movea, con ayudas de 200 euros para la compra de estos vehículos. La novedad del año 2017 es que tanto el Plan Movea como el Movalt excluyen las ayudas para las bicicletas. Por todo esto, desde la Red de Ciudades por la Bicicleta solicitamos que el Ministerio reconsidere la inclusión de la bicicleta eléctrica en el Plan Movalt 2017".

En España este mercado está en auge, hasta el punto de que en 2016 nacieron 56 firmas dedicadas a este negocio, una gran cantidad de tiendas de ciclismo comprometidas con el transporte limpio donde se pueden encontrar cientos de modelos de e-bikes de diferentes marcas. Entre 2013 y 2016 las ventas en unidades crecieron de poco más de mil hasta superar el millón y en ese mismo periodo, los ingresos del sector crecieron de 1.270 millones a 1.549 millones de euros, un 22 % más.

El uso de la bici eléctrica reporta muchas ventajas dentro de las ciudades; y en numerosos países de nuestro entorno este mercado no para de crecer y aspira a convertirse en el medio de transporte del futuro por ser limpio, rápido y evitar las grandes congestiones de vehículos en las grandes ciudades.

A pesar de todas las bondades que representa su utilización y después de todo el revuelo generado por una norma incomprensible para muchos, el Ministerio tuvo que emitir un comunicado para explicar tal decisión. El ejecutivo aseguró que el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) "apoya la bicicleta, pero siempre que sea como opción de transporte en la ciudad, es decir, como alternativa al vehículo privado", y añadían que "no se subvenciona la compra de bicicleta para ocio, dado que el IDAE lo que persigue es el ahorro de energía en el transporte y un cambio hacia modos más eficientes".