A todos nos gustaría conocer las razones definitivas para conducir un coche eléctrico más allá de las ventajas concidas a favor de la sostenibilidad y el medio ambiente, con el uso de carriles especiales y zonas reservadas de aparcamiento.
Por este motivo, la compañía automovilística SEAT ha difundido una información que defiende que más allá de los beneficios para el planeta, conducir un coche eléctrico también tiene beneficios para el usuario, sobre todo en las grandes ciudades, donde supone un ahorro claro de tiempo y dinero.
Según Carlos de Luis, responsable de movilidad eléctrica en el área de Relaciones Institucionales del Grupo Volkswagen, las razones por las que resultaría ventajoso para los usuarios conducir un coche eléctrico son:
- Minimizar los atascos
Uno de los grandes incentivos de este tipo de vehículos es poder eludir las retenciones de tráfico. En muchas ciudades europeas se premia a los usuarios de del coche eléctrico al que se permite circular por el carril bus. Es el caso de Madrid, donde los coches con muchos ocupantes o los eléctricos e híbridos, con un solo usuario, pueden utilizarlos. Viviendo a las afueras de una gran ciudad, gracias a esta medida, te ahorras unos 30 minutos al día al ir y volver del trabajo. Para muchos usuarios es la razón fundamental por la que han optado por un eléctrico.
- Estacionar fácilmente
Otro de los problemas de las grandes ciudades es el estacionamiento, pero cada día más ciudades ofrecen facilidades a los conductores de un coche eléctrico, como plazas reservadas con descuentos o gratuitas. Ocurre en Madrid, donde se puede estacionar en zona azul y verde sin pagar un céntimo y sin límite de tiempo. Ni siquiera hace falta pasar por el parquímetro para sacar el ticket.
- Acceder al centro de las ciudades
Son casi 300 ciudades europeas las que ya cuentan con zonas de bajas emisiones, hasta el punto de que la Ley de Cambio Climático española obliga a crear zonas de bajas emisiones a las ciudades de más de 50.000 habitantes. En este sentido, el vehículo eléctrico es la solución a las restricciones en las ciudades, haciendo posible acudir a las reuniones de trabajo de puerta a puerta.
- Cargar, y en marcha
En Europa ya existen más de 150.000 puntos públicos de recarga, y las administraciones se van dando cuenta de que deben facilitar e incentivar la infraestructura de recarga, pública y privada a este tipo de vehículos. Por oytra parte, hay muchos establecimientos que ofrecen como cortesía plazas con recarga. Además, es una forma de ahorrar tiempo y dinero.
- Más autonomía, por menos dinero
Un punto a favor para conducir un coche eléctrico es la cada día mayor autonomía que ofrecen, que cada día va aumentando. Cuando se recarga el coche por la noche en el garaje, el nivel de la batería casi nunca es un problema si solo circulas por ciudad. Por otra parte, el menor consumo y mantenimiento hace que aunque sea más cara su compra, calculando los gastos durante la vida del vehículo, salga a cuenta el coche eléctrico.
- Obtener ayudas a la compra y pagar menos impuestos.
Las marcas persiguen democratizar la movilidad eléctrica con vehículos asequibles, y aunque sea mayor el precio del coche eléctrico, las ayudas e incentivos suponen una gran ventaja en este sentido. Además, hay ventajas en relación a los impuestos. Por ejemplo, en España, la bonificación sobre el impuesto de circulació en numerosos municipios alcanza hasta el 75%, mientras en Portugal, los propietarios de un eléctrico están totalmente exentos de esta tasa y de la de registro, y en Gran Bretaña, no pagan el canon por congestión.
