La marca de coches de lujo Bentley, perteneciente al Grupo Volkswagen, no cuenta con ningún modelo cien por cien eléctrico, y parece que su intención es adaptarse pocon a poco a la nueva industria. Así las cosas, el CEO de la marca, Adrian Hallmark, ha afirmado que la llegada del primer modelo eléctrico no se producirá hasta que no mejore la densidad de energía de las baterías.
Los modelos de Bentley pertenecen a un segmento de vehículos muy grandes y pesados, y “con el tamaño de nuestros vehículos y el área frontal que empujamos, la densidad de energía actual de las baterías limita el tamaño del coche que podemos ofrecer, compatible con una autonomía suficiente”, ha explicado Hallmark.
Según el directivo, la batería que está previsto que incorpore esta marca llegará al mercado entre 2023 y 2025, de tal forma que ha asegurado en una entrevista en la revista Automotive News Europe que “no habrá nada industrializado hasta esta fecha”, por lo que este es el objetivo que se ha puesto el fabricante inglés para tener en su catálogo un coche eléctrico que quieran comprar sus clientes.
La marca ha sondeado la aceptación que esta tecnología tendrá entre sus clientes, y ha concluido que el 40% de estos han considerado o considerarían la compra de un coche eléctrico; mientras que un amplio segmento de los posibles compradores de un coche de lujo sí adquiría un vehículo de este tipo sí este fuese eléctrico.
En el Salón del Automóvil de Ginebra de 2017, Bentley presentó el EXP 12 Speed 6e un coche eléctrico biplaza, con aspecto de deportivo que, según Hallmark, no será el primer modelo eléctrico de la marca. “No creo que necesitemos automóviles deportivos. Dentro del Grupo Volkswagen ya hay suficientes”, ha explicado.
El fabricante podría utilizar la arquitectura Premium Platform Electric (PPE) actualmente en desarrollo por dos fabricantes pertenecientes también al Grupo Volkswagen, Porsche y Audi. Su versión final estará lista en 2021 y habilitará tres estilos de carrocería, incluyendo el formato SUV y las limusinas.
